La jornada de ayer en Ariza estuvo marcada por el arte y la música, con la clausura del Festival de Arte Callejero Contra-Bando por la mañana y el Festival Ariza Rock por la tarde. El evento atrajo a numerosos vecinos y visitantes, mucha gente de localidades de ambas vertientes del Alto Jalón, consolidando a Ariza como un referente cultural en la región.
La mañana del sábado comenzó con la clausura del Festival de Arte Callejero Contra-Bando. El evento, en su segunda edición, reunió a una gran cantidad de personas que acudieron para admirar los murales presentados. Estas obras de arte, que quedarán de manera permanente en las calles de Ariza, fueron el centro de atención durante la jornada. La fiesta de clausura, amenizada por el vermut musical de Del Desierto, brindó un cierre festivo a esta celebración del arte urbano.
La iniciativa, liderada por JotaPe y Allan Halley, ha sido nuevamente un éxito rotundo. "La gente ya nos pide que el próximo año les pintemos su casa", comentaron desde la organización, satisfechos con la acogida y el desarrollo de esta segunda edición. Los murales han dejado una huella permanente en Ariza, y los vecinos ya esperan con entusiasmo la próxima edición del festival.
Festival Ariza Rock 2024
Por la tarde, el matadero de Ariza se transformó en el epicentro del rock con el inicio del Festival Ariza Rock 2024. Este festival, caracterizado por su espíritu 100% rural y autogestionado, contó con la participación de numerosos grupos de punk rock de la zona. Muchos de estos grupos están formados por músicos jóvenes, demostrando que las inquietudes musicales están vivas y presentes en el medio rural.
La Asociación Rural Sonic, de Torrijo de la Cañada, estuvo también presente, ofreciendo su apoyo y cobertura del evento. Durante la próxima semana, proporcionarán crónicas detalladas y entrevistas en profundidad a todos los grupos que participaron en El Alto Jalón, extendiendo el eco de este festival más allá de la jornada de ayer.
Un Encuentro Intergeneracional
El Festival Ariza Rock no solo reunió a amantes del punk rock, sino que también fue un punto de encuentro intergeneracional. Desde niños hasta personas mayores, todos disfrutaron del ambiente festivo y la música en vivo. A medida que avanzaba la tarde y la noche se hacía más joven, cientos de personas continuaron celebrando, saltando y bailando hasta la madrugada al ritmo del punk rock rural.
La jornada de ayer en Ariza fue un claro ejemplo de cómo el arte y la música pueden unir a una comunidad, proporcionando espacios para la creatividad, la expresión y la diversión. Con eventos como Contra-Bando y Ariza Rock, Ariza sigue demostrando su compromiso con la cultura y el entretenimiento, dejando una marca duradera en todos los que participaron y asistieron.
JALON
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