El Celso Conchero de Ariza fue testigo de un partido lleno de intensidad y emoción que, pese a la derrota final, dejó buenas sensaciones para la afición local. La U.D. Ariza se enfrentó al E.F.B. La Muela, líder indiscutible de la Primera Regional Aragonesa, en un duelo que estuvo marcado por la valentía y el esfuerzo de los arizanos, que rozaron la gesta pero acabaron cediendo en los últimos minutos.
El encuentro arrancó con un guion inesperado. Los de Ariza, lejos de intimidarse ante el líder, salieron con ímpetu, presionando alto y generando peligro desde el inicio. Su intensidad sorprendió a un equipo de La Muela que tardó en asentarse en el campo.
Las ocasiones comenzaron a llegar para los locales, con un Raúl Antón especialmente incisivo en ataque. Fue precisamente Antón quien rompió el empate en el minuto 43, y adelantó a los suyos desatando la alegría en las gradas. El 1-0 reflejaba lo visto en el terreno de juego y marcó el camino a vestuarios.
Tras el descanso, el E.F.B. La Muela salió con otra cara, dispuesto a imponer su condición de líder. Sin embargo, la defensa del Ariza se mantuvo firme, neutralizando una y otra vez las embestidas visitantes.
Con el reloj avanzando y el marcador intacto, los nervios comenzaron a aparecer en las filas de La Muela. La estrategia del técnico local, que apostó por un repliegue ordenado y contragolpes rápidos, parecía estar funcionando. Pero todo cambió a partir del minuto 75, cuando los banquillos empezaron a mover ficha.
El cansancio acumulado por los arizanos y la calidad individual de los visitantes marcaron la recta final. En el minuto 80, Assier Couto empató el partido con un potente cabezazo tras un centro milimétrico desde la banda derecha. El golpe fue un mazazo para los locales, que apenas tuvieron tiempo de reponerse antes de que, en el 85, Hugo Lobez completara la remontada con un disparo cruzado imposible para el guardameta local.
Todavía tuvo el U.D. Ariza una última para empatar el encuentro en el último minuto, tras robar arriba el balón, pero una vez más, y se está convirtiéndo en tónica este año, el cuero no quería entrar en la portería rival.
El pitido final dejó a los jugadores de la U.D. Ariza abatidos pero con la cabeza alta. Aunque el resultado no fue el deseado, el equipo demostró que puede competir de tú a tú incluso con los mejores. La entrega y el buen planteamiento táctico quedaron patentes, y el esfuerzo colectivo dejó claro que el equipo está en el camino correcto.
Por su parte, el E.F.B. La Muela ratificó su liderazgo con una victoria sufrida que refleja la fortaleza mental de un equipo acostumbrado a encontrar soluciones incluso en los momentos más complicados.
Con esta derrota, la U.D. Ariza cierra el año sin puntos y muy cerca del descenso, pero con motivos para la esperanza. El parón navideño será una oportunidad para recargar energías y ajustar detalles de cara a una segunda vuelta en la que buscarán consolidarse en la categoría. El espíritu mostrado en este partido, sin duda, es el camino a seguir.
JALON
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