ARANDA DEFIENDE LA EXTERNALIZACIÓN DE SERVICIOS EN EL HOSPITAL DE CALATAYUD COMO MEDIDA "TEMPORAL Y NECESARIA ANTE LA FALTA DE PROFESIONALES"

El déficit de profesionales en el Hospital Ernest Lluch de Calatayud está provocando la preocupación a partes iguales de trabajadores, responsables políticos y usuarios ante una carencia que desde el sindicato CSIF cifran en 60 profesionales en diferentes servicios. La Consejería de Sanidad ha decidido cubrir esta situación actual mediante la externalización de los trabajos, lo que ha encendido las alarmas en el sindicato, quienes alertan de un desmantelamiento de la Sanidad Pública y de su privatización, mientras se preguntan por qué sí hay dinero para ofrecer contratos a las empresas privadas, y no para mejorar las condiciones de los profesionales públicos y hacer más atractivas las plazas vacantes.

Esta mañana, en Buenos Días Alto Jalón, el alcalde de Calatayud y senador del Partido Popular por Zaragoza, José Manuel Aranda, ha defendido la contratación de servicios sanitarios privados como "única salida rápida" ante la situación de falta de profesionales en el hospital Ernest Lluch. En su entrevista, Aranda ha admitido la gravedad de la situación, pero ha responsabilizado de la problemática a la "mala gestión del anterior Gobierno de Aragón", acusando al anterior ejecutivo de "falta de planificación formativa en años anteriores" y ha asegurado que “la solución ahora no puede llegar en dos años”, haciendo referencia al tiempo que el PP y el ejecutivo de Jorge Azcón llevan en el Gobierno.

El senador bilbilitano ha señalado que el déficit de especialistas afecta no solo a Calatayud, sino también a otros hospitales periféricos como Barbastro, Teruel o Alcañiz. Según ha explicado, la solución del Gobierno de Aragón ha sido contratar al grupo privado Ribera Salud ante la imposibilidad de cubrir las bajas por otras vías. “No es privatizar, es dar una solución a los ciudadanos”, ha afirmado Aranda, subrayando que “no podemos dejar desatendidos a los pacientes”.

“Los especialistas no salen del aire”

Aranda, también médico de profesión, ha justificado que la escasez de profesionales es fruto de un problema estructural: “Formar a un especialista lleva entre 9 y 11 años y no se ha incrementado la oferta de plazas universitarias en los últimos años”. Además, ha puesto el foco sobre las mejoras sociales y laborales conseguidas en los últimos años en nuestro país: "Se ha puesto en marcha una ley de conciliación laboral sin dotar al sistema de los recursos necesarios y ahora nos encontramos con tener que cubrir por ejemplo bajas de maternidad y de paternidad, pero sin recursos para poder hacerlo".

En este sentido, ha criticado que "desde algunos sectores" se pongan trabas a la creación de universidades privadas -haciendo referencia a la controversia sobre la decisión del Consejo de Ministros de endurecer las condiciones para la implantación de nuevas universidades que afecta a la Universidad Niccòlo Cussano y su pretensión de instalarse en Calatayud-. Según ha dicho, tener más universidades permitiría ampliar el número de futuros médicos.

El alcalde y senador bilbilitano ha valorado también la circunstancia de que la administración pública no encuentre profesionales para cubrir sus plazas, pero la empresa privada sí consiga proveer de estos sanitarios al sistema público de Salud. 

El 25% de los aragoneses tiene póliza privada

Preguntado por la inversión de dinero público en empresas privadas como Ribera Salud, ha respondido que “cada día que faltaba un profesional me parecía bastante mal” y que el coste es secundario si la atención está garantizada. “Repito: si no hay profesionales, tendremos que recurrir a la privada, cueste lo que cueste, para dar el servicio”, ha afirmado.  "Antes que dejar desprovistos de esa atención sanitaria a los ciudadanos de Calatayud, yo desde luego creo que la Consejería de Sanidad ha buscado todas las soluciones posibles y esas entre esas soluciones ha encontrado que el Grupo Rivera de esa solución. Eso no es privatizar, eso es dar una solución al ciudadano ante la falta de otro tipo de soluciones dentro del ámbito público", ha asegurado.

En este sentido, Aranda ha defendido que un 25% de la población aragonesa tiene ya seguro privado, porcentaje que llega al 40% en comunidades como Madrid. El senador ha afirmado que esa elección responde a la libertad individual de cada usuario, pero ha evitado entrar a valorar si este auge de la sanidad privada en nuestro país se debe a las cada vez peores prestaciones que ofrece el sistema público, principalmente por el déficit de especialistas en la Sanidad Pública. “No sé si los profesionales que están ahora en la privada es porque antes estaban en la pública. Lo desconozco”, ha insistido, rebatiendo las quejas sindicales sobre las condiciones laborales que ofrece el sistema sanitario aragonés.

El objetivo: estabilizar el sistema público

En todo caso, Aranda ha querido transmitir un mensaje de tranquilidad: “La finalidad es sostener, reforzar y mantener el sistema público”, ha afirmado, reconociendo que la contratación con Ribera Salud es una solución “puntual, no de por vida”. En este sentido, ha señalado que en junio y septiembre finalizarán su formación nuevos médicos que podrían incorporarse al sistema público.

Aranda ha apuntado también a la importancia de poner en marcha medidas estructurales a largo plazo como el aumento del número de plazas MIR o la acreditación de títulos de médicos extracomunitarios, así como la prolongación voluntaria de la edad laboral de los profesionales.  "En estos momentos hay multitud de profesionales que están pendientes de que les acrediten su título, provenientes o no provenientes de países sudamericanos o de países extracomunitarios. Eso es una situación que también se lleva demandando al Ministerio de Universidades", ha destacado. 

Como dato esperanzador de cara al futuro, Aranda ha destacado que "este año, después de insistir desde mi Grupo en el Senado y en el Congreso, se ha vuelto a una elección presencial de plaza por parte de los nuevos MIR. Eso ha determinado, entre otras cosas, que se cubrieran el cien por cien de las plazas y el que se cubrieran todas las plazas de Medicina de Familia. Esa situación, antes o después, terminará dando soluciones ".

La despoblación, un factor clave

Sobre la sanidad en el medio rural, Aranda ha reconocido que “es muy difícil que la privada tenga cabida en el mundo rural” y que por eso hay que reforzar la sanidad pública. También ha admitido que las condiciones personales y la cercanía familiar pesan mucho a la hora de elegir plaza por parte de los profesionales, y que “la libertad de elección termina perjudicando al medio rural”.

Una libertad de elección que lleva a los profesionales mayoritariamente a elegir plazas en entornos urbanos. Aranda ha defendido el trabajo que están haciendo las Consejerías de Fomento y Sanidad del Gobierno de Aragón "buscando alternativas en cuanto a facilitarles el domicilio e incluso buscar trabajo en esos destinos rurales a las parejas de los profesionales". Todo ello para intentar solventar una situación que "sobre todo afecta a los hospitales comarcales y los entornos periféricos y rurales", ha destacado.

Finalmente, ha expresado su confianza en que la reciente Ley de Garantía Rural pueda ayudar a revertir esta situación, al exigir que toda ley futura se analice en clave de impacto territorial. "Tenemos que luchar para que todos los territorios trabajemos en igualdad de condiciones y ojalá las personas también fueran capaces de valorar la calidad de vida con la que se viven nuestros pueblos", ha concluido.

Escucha aquí la entrevista completa.