EL SECRETO DE ARCOS DE JALÓN Y SU FENÓMENO DE NUEVOS Y ORIGINALES EMPRENDIMIENTOS

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Hoy hemos vuelto a ver en un medio de comunicación la incipiente actividad emprendedora que ha surgido en Arcos de Jalón. No sólo El Alto Jalón, sino también medios informativos de toda la provincia de Soria y de Castilla y León, acuden a esta localidad soriana para interesarse por este fenómeno. Es inevitable, viendo la cantidad de negocios nuevos que se han puesto en marcha en Arcos de Jalón en los últimos años, preguntarse, ¿qué está pasando en este pueblo? Atendiendo a las cifras oficiales, es el único de nuestra comarca que ha tenido crecimiento poblacional significativo el año pasado, en concreto son 30 los nuevos habitantes. Dato que seguramente venga propiciado por este emergente movimiento emprendedor en la localidad soriana del Alto Jalón. Pero, ¿por qué está ocurriendo?


Arcos de Jalón, a pesar del declive inevitable que ha sufrido todo el Alto Jalón desde mediados del siglo pasado, ha seguido manteniendo la mayoría de sus servicios y su condición de cabeza de comarca, lo que le ha llevado a sostener su economía, aunque con pinzas, para llegar a este momento todavía con los mimbres puestos sobre los que poder hacer un cesto. Funciona el Centro de Salud, el Instituto de Enseñanza Secundaria, el Colegio, la Escuela Infantil, el Espacio Cultural, se mantiene un cierto nivel aceptable de persianas abiertas de diferentes comercios que permiten tener de todo al alcance de la mano, las instalaciones deportivas son muy completas y se siguen actualizando, la oferta cultural es, aunque podría ir más lejos, diversa y en cantidad, y el ocio, bueno... digamos que Arcos de Jalón es la capital de la fiesta del Alto Jalón.


Con todo esto, se ha implementado la oferta de formación con un nuevo Ciclo de Grado Superior de Informática, lo que ha supuesto no solo el regreso de la FP a la localidad, sino también poder mantener abierta la residencia de estudiantes, o lo que es lo mismo, más puestos de trabajo. Además, el núcleo urbano principal cuenta con Fibra Óptica y 5G, y se ha trabajado en potenciar el emprendimiento con iniciativas como Biblioteca para Emprender o ayudas consistoriales de fomento del empleo. Y la pandemia también ha cumplido su misión en esto, que no todo iba a ser malo, haciéndonos retornar a muchos que nos planteábamos una opción de vida mejor, y nos hemos encontrado aquí con una realidad que nos deja muchos recursos por explotar en este mundo rural de oportunidades que es el Alto Jalón. 


Una realidad, además, muy diferente a la de hace años. Las posibilidades que nos ofrecen las nuevas tecnologías nos permiten desempeñar una vida profesional plena sin necesidad de vivir obligatoriamente en una ciudad y, ¿dónde mejor que en mi pueblo, donde tenemos de todo y si echamos algo de menos, tenemos a hora y media de distancia la gran capital? Porque la situación geográfica es otra de estas ventajas que siempre hemos tenido, no sólo en Arcos, sino en todo el Alto Jalón. Siempre en la historia hemos explotado nuestra favorable demarcación, pero que en el último siglo no hemos sabido cómo aprovecharla, y más bien nos ha servido para vaciarnos más rápido que el resto. Ahora parece que también esto podemos cambiarlo.


Que sí, que sí, que tenemos que pedir más. Que necesitamos mejores servicios, banda ancha también en las pedanías, transporte a la demanda y convencional, un ferrocarril que nos permita viajar a Madrid o a Zaragoza en el día, o conectarnos con los pueblos vecinos sin necesidad de tener que coger el coche por obligación. Que sí, que sí, que necesitamos más vida cultural y más oferta formativa para que nuestros hijos no tengan que marcharse inexorablemente a la ciudad, y que también hay que solucionar el problema del polígono para atraer a alguna industria que termine de fortalecer el tejido empresarial. Pero con lo que tenemos, se ha demostrado que se puede empezar a trabajar y a tender puentes de acero que provoquen el resurgir de una localidad que hasta hace pocos años se veía totalmente perdida, sobre todo por sus propios habitantes.


¿Y qué ha cambiado para que sean los propios arcobrigenses los que, creyéndoselo, estén haciendo posible el milagro de los nuevos emprendimientos? El Ejemplo, altojaloneras y altojaloneros, ha sido exactamente eso. El Ejemplo con mayúsculas de aquellos que nunca se fueron, como, entre muchos otros, Mobisanz, Numancia, Ramiro, Riosalido, Santander o Asesoría Rebate, éste, uno de los últimos jóvenes que apostó por jamás marcharse. Un empeño de otros, que permitió ver posible su retorno a Clara Sanz, fundadora de La Moderna Rural Shop, el espejo con el que nos hemos empoderado todos los demás retornados. Ella abrió el camino para que yo viera posible hacer El Alto Jalón y, modestamente aunque parezca que no, este medio de comunicación es el que ha dado voz a los que ya estaban, y a los que hemos venido, para que otros sintieran, como nosotros, que el mundo rural es una opción a la que no hay que ponerle ningún 'pero' y que nos permite que seamos dueños de nuestro destino.


Aquí, ni se vive peor (más bien al contrario), ni nos falta de nada, ni existe el aburrimiento, ni la vida social está apagada... nada de eso que siempre ha estado en la cabeza de quienes no conocen la vida en el pueblo es cierto. Esto es lo que ocurre en Arcos de Jalón, y también lo que está ocurriendo, en líneas generales, en aquellos pueblos del Alto Jalón que cuentan con todos los servicios integrales o que han podido encontrar un recurso propio sobre el que construir un futuro. 


Esto es lo que La Moderna Rural Shop demuestra, y lo que desde El Alto Jalón contamos al mundo entero a través de la magia de Internet, que hoy en día nos permite hacerlo, tanto a nosotros como a Clara Sanz. ¿Internet es entonces el secreto? Sin duda, sí, es cierto, pero también es importante que la administración ponga los mimbres necesarios para que podamos seguir haciéndolo. Ejemplos como los de Arcos o Monteagudo son solo algunos donde está ocurriendo esto. Encontramos también nuevos emprendimientos de jóvenes apostando por su pueblo en Cetina, Alhama de Aragón, Ibdes, Ariza... todos ellos con el convencimiento de vivir en su pueblo y de emprender ofreciendo un valor añadido a la población, o como el alcalde de Arcos dice "servicios nuevos que antes no teníamos".


Por poner a todo esto un 'pero', diré que es difícil, de momento, convencer a alguien que no sea del pueblo de que este es un lugar para venirse aquí a vivir. Lo primero, porque después de tantos años de que la comunicación haya denostado a todo lo que tenía que ver con lo rural, ahora nos queda mucho camino por recorrer a todos los que nos dedicamos a difundir las ventajas que ofrece el pueblo, contando una y otra vez las oportunidades que se presentan y dando voz a estos EJEMPLOS que os exponemos (lo seguiremos haciendo). 


Y lo segundo, y mucho más importante, porque adolecemos de un problema fundamental que, espero, empecemos en la siguiente legislatura a solucionar en todo el Alto Jalón. La vivienda, o la falta de ella, es el mal fundamental de Arcos de Jalón y del resto de municipios de nuestra comarca. Todavía se agrava más en las zonas turísticas como Alhama de Aragón, donde los pisos se convierten en alojamientos rurales de dos en dos, dejando sin opciones de residencia a los cerca de medio millar de trabajadores que tiene la localidad solamente entre la fábrica Zalux y los dos balnearios. Así se explica que con 500 puestos de trabajo en solo tres de los muchos negocios del pueblo, el municipio haya bajado hasta los 964 habitantes y siguiendo...


La existencia de vivienda pública en régimen de alquiler es nula en el Alto Jalón, apenas alguna casa y todas ellas, por supuesto, ya alquiladas. ¿Qué pasaría si hubiera una buena oferta de alquiler residencial en Alhama de Aragón? ¿Qué pasaría si Horta Coslada o Ferga no tuvieran dificultades para encontrar vivienda para sus trabajadores en Arcos de Jalón o Ariza? ¿Qué pasaría si algún ayuntamiento ofertarse alojamiento a quien decidiera apostar por instalarse y teletrabajar desde el Alto Jalón? ¿Cómo puede plantearse una empresa decidir producir aquí sin vivienda para sus trabajadores? ¿Cómo vamos a crecer en población si no tenemos dónde meternos? ¿Por qué pasa todo esto habiendo tantas casas vacías con las persianas bajadas todo el año? Es el momento de preguntarse esto, y muchas otras cosas, mientras leemos cada programa electoral de los que en breve llegarán a nuestros buzones, pues el 28 de mayo tenemos elecciones para decidir si queremos que nuestro pueblo recupere (o no) población. 

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