LA IMPOSIBILIDAD DE ENCONTRAR UN FONTANERO DISPONIBLE PROVOCA PROBLEMAS EN EL SUMINISTRO DE AGUA DE MONTEAGUDO DURANTE TRES DÍAS

Desde el pasado fin de semana, una avería en una tubería principal del suministro de agua de boca en Monteagudo de las Vicarías ha provocado cortes en el servicio que han durado hasta la mañana de hoy, martes, cuando el primer fontanero disponible ha podido acudir a la localidad rayana para solventar la avería. El déficit de profesionales de diferentes ámbitos es un hándicap que vive el mundo rural asociado a la despoblación, un hecho que ha quedado patente en la localidad rayana del Alto Jalón estos días.

La distribución de la red de agua potable de Monteagudo de las Vicarías, que no está apenas sectorizada, ha provocado que la avería detectada en el barro del Arrabal, próximo a la carretera, haya afectado a todo el municipio. En un principio, el Ayuntamiento de la localidad rayana del Alto Jalón decidió cortar el agua para evitar que esta se perdiese en grandes cantidades, quedando con ello todo el pueblo sin suministro. El dilema creado por la imposibilidad de encontrar un fontanero disponible a corto plazo, unida al intenso calor que se está viviendo estos días, llevó finalmente al consistorio a tomar la decisión de abrirla para el consumo vecinal a pesar del escape, interrumpiendo el suministro por la noche, desde las 22 horas, hasta las 7 de la mañana.

Después de todo el fin de semana sufriendo cortes y pérdidas de agua a causa de una avería, a las 15.30 horas de este martes, algo más de cuatro horas después de la llegada del fontanero, el problema estaba solucionado. El agua ha dejado de brotar sin control por la tubería rota y los vecinos y vecinas de Monteagudo de las Vicarías ya pueden volver a tener, tres días después, un servicio normal de agua en sus domicilios. A pesar de ser un trabajo que precisaba de una acción urgente y de las gestiones municipales realizadas para solucionarlo "lo antes posible", no se ha podido disponer de un profesional cualificado antes de este martes, provocando esta escasez de profesionales en el mundo rural un coste tanto económico, como en la calidad de vida de los habitantes del municipio.