LA GUARDIA CIVIL INVESTIGA AL MAQUINISTA Y A OTRAS CUATRO PERSONAS COMO PRESUNTOS RESPONSABLES DEL INCENDIO DEL ALTO JALÓN

La Guardia Civil ha investigado a cinco personas como presuntas autoras del incendio forestal declarado el pasado 18 de julio entre Bubierca y Ateca. Los presuntos autores están siendo investigados por imprudencia grave, por su participación en la realización de trabajos de reforestación que provocaron el fuego que afectó a nueve municipios de la provincia de Zaragoza, calcinando una superficie de 14.000 hectáreas de monte y frutales, y obligando al desalojo de 1.700 vecinos de Alhama de Aragón, Bubierca, Castejón de las Armas y Moros, así como de cerca de 500 bañistas de los balnearios alhameños, y muchos turistas e hijos del pueblo que pasaban esos días en cada una de las cinco localidades.

Como consecuencia de las distintas comprobaciones realizadas, en total se ha investigado a cinco personas, sobre las que se han instruido las correspondientes diligencias que serán entregadas en el Juzgado de Instrucción de Calatayud y la Fiscalía Provincial de Medio Ambiente. Los especialistas del SEPRONA determinaron que podía existir imprudencia grave tanto por parte de la persona que manejaba los mandos de la máquina, como de otras cuatro pertenecientes a las empresas que dirigían y supervisaban los trabajos de reforestación. Además de al maquinista, se investiga al encargado de Campos Rey Trabajos Forestales, contrata que realizaba los trabajos, y a tres trabajadores de Land Life, empresa contratante que encargó los trabajos de reforestación. 

El fuego se propagó rápidamente afectando a los municipios de Ateca, Bubierca, Moros, Villalengua, Terrer, Alhama de Aragón, Villarroya de la Sierra, Cetina, Contamina y Embid de Ariza. Tras tener conocimiento del hecho, los especialistas del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil de Zaragoza iniciaron una investigación para el esclarecimiento de las causas y circunstancias en que se produjo el incendio, así como la posible existencia de responsabilidades por parte de personas o empresas involucradas.

Una vez localizado el punto exacto donde se inició el fuego y realizado un estudio de su evolución, la Guardia Civil recabó numerosos datos y manifestaciones y obtuvieron diferentes indicios que permitieron concretar que el incendio se había producido al golpear contra una piedra el ahoyador de una máquina retro-araña que trabajaba en la zona.

La Guardia Civil recomienda abstenerse de realizar actividades que puedan entrañar riesgo de incendio, ya que se puede incurrir por imprudencia grave en un ilícito penal además de las graves consecuencias que suelen originar los incendios forestales para las personas, los bienes y el medio ambiente.