El consejero de Hacienda, Interior y Administración Pública, Roberto Bermúdez de Castro Mur, ha firmado este viernes la Orden por la que se dictan instrucciones para la elaboración de los Presupuestos de la Comunidad Autónoma de Aragón para el ejercicio 2026.
Aragón afronta el inicio del ciclo presupuestario con una posición económica sólida. Las previsiones apuntan a un crecimiento del PIB regional del 2,7% en 2025, en línea con la media nacional. Esta evolución positiva permite plantear el diseño de unos presupuestos orientados al fortalecimiento de las políticas públicas y el cumplimiento de los objetivos estratégicos del Gobierno de Aragón.
Los Presupuestos para 2026 se elaborarán conforme a los principios de estabilidad presupuestaria, sostenibilidad financiera y eficiencia en el uso de los recursos públicos. Las directrices para la distribución del gasto se ajustarán al límite de gasto no financiero que aprueben las Cortes de Aragón.
Los departamentos y entidades del sector público autonómico deberán continuar aplicando criterios de revisión del gasto, priorizando las políticas más relevantes y ajustando sus compromisos a los recursos disponibles. Las propuestas de modificación del texto articulado que envíen las distintas áreas deberán producirse antes del 25 de julio de 2025.
Asimismo, los fondos europeos (FEAGA, FEADER, FSE+, FEDER y FEMP) y los procedentes del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) se presupuestarán siguiendo las directrices financieras y técnicas establecidas, garantizando su eficacia y eficiencia.
El escenario global
El documento parte de un análisis económico prudente, marcado por un escenario global y nacional de creciente incertidumbre. La evolución geopolítica de los últimos meses, especialmente los conflictos en Ucrania y Oriente Próximo, y las tensiones económicas internacionales, como la política arancelaria de la nueva Administración estadounidense, afectan de forma directa a la economía global.
Esta inestabilidad se ve agravada por la falta de Presupuestos Generales del Estado para 2024 y 2025, lo que está suponiendo para Aragón una reducción mensual de 61,5 millones de euros en las entregas a cuenta del sistema de financiación autonómica. Esta situación genera una presión innecesaria sobre la tesorería de la comunidad, que se debe a una decisión unilateral del Ministerio de Hacienda.
Además, se mantienen las dudas sobre el impacto de posibles medidas extraordinarias del Gobierno central, como la condonación parcial de la deuda autonómica, que podrían alterar la planificación financiera de las comunidades.
El grado de incertidumbre se incrementa ante la posibilidad de que medidas extraordinarias, como la condonación parcial de deuda autonómica u otros acuerdos del Gobierno central, puedan suponer aumentos puntuales de crédito o disminuciones de ingresos.
Todo lo anterior, junto con las crecientes inseguridades en el entorno internacional y nacional, que comienzan a consolidarse como sistémicas, impacta de forma relevante en las líneas generales que definirán el proyecto presupuestario de Aragón para 2026 y, por tanto, deben ser tenidas en cuenta.
Desde el punto de vista técnico, la Orden se apoya en el marco normativo establecido en el Estatuto de Autonomía de Aragón, la Constitución Española y la Ley de Hacienda autonómica. En ella se detallan los criterios generales de presupuestación, la estructura del presupuesto y el calendario de elaboración, así como las obligaciones de los distintos departamentos y entidades públicas.
Los Presupuestos se elaborarán conforme a los principios de estabilidad presupuestaria, sostenibilidad financiera y eficiencia en la asignación y utilización de los recursos públicos, y se orientarán a la consecución de los objetivos de la política económica del Gobierno de Aragón.
JALON
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