La presentación de Las lechuzas no son lo que parecen, primera novela de la escritora y traductora cetinera Noemi Risco Mateo, se ha convertido este domingo en uno de los momentos más especiales de la Semana Cultural de Bubierca. El acto, celebrado en el Bar El Barril, reunió a un numerosísimo grupo de vecinos y visitantes en torno a una conversación que fue mucho más allá de la literatura.
La charla se abrió paso hacia terrenos profundamente personales y colectivos, con instantes cargados de emoción. Hubo silencios atentos y miradas cómplices cuando se habló del incendio que marcó a la zona, y se vivieron momentos especialmente intensos cuando algún vecino compartió su propia historia de regreso al mundo rural, en un paralelismo directo con la experiencia de Noemi y con las páginas de su libro.
Ambientada en el Alto Jalón y con escenarios que remiten tanto a Cetina como a la propia Bubierca, la obra ha encontrado una respuesta entusiasta en la comarca, donde ya ha sido presentada con éxito en localidades como Ariza o Cetina. Su mirada crítica y emocional sobre la vida en los pueblos, las relaciones humanas y los secretos que guardan sus calles ha calado hondo entre los asistentes.
La cita literaria coincidió además con un nuevo capítulo en la vida social de Bubierca: el Bar El Barril ha cambiado recientemente de manos tras la jubilación de sus anteriores regentes. Ahora está gestionado por nuevos pobladores que, además de continuar con la hostelería, han abierto una pequeña tienda, convirtiendo el local en un punto renovado de encuentro y servicios para el municipio.
Con esta presentación, Bubierca no solo ha celebrado la literatura y las raíces, sino también el dinamismo de un pueblo que sigue escribiendo nuevas páginas en su propia historia.
JALON
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