LA LARGA SEQUÍA COMIENZA A VACIAR LOS EMBALSES DEL ALTO JALÓN

Las reservas hídricas del Alto Jalón descienden en picado ante la total ausencia de lluvias durante un 2023 que está resultando de los más secos de las últimas décadas. Después de un mes de marzo en el que las precipitaciones han sido especialmente escasas, sigue durante este mes de abril la sequía meteorológica en el conjunto de España, tanto para los indicadores de los últimos doce meses, como para los de los últimos tres años, lo que significa que persiste la sequía de larga duración que comenzó a finales  del diciembre pasado.

Así las cosas, La Tranquera ha descendido esta semana su volumen en un 2,4% hasta situarse por debajo del 70% de su capacidad máxima. Un descenso que también se ha visto en Monteagudo de las Vicarías, donde el nivel del agua ha bajado esta semana un 1,8% y deja al pantano rayano por debajo del 60% de su capacidad máxima. Con este nuevo descenso, ambos embalses del Alto Jalón se encuentran en peor situación que el año pasado por estas mismas fechas, cuando también se arrastraba una larga sequía invernal como ahora.

En el caso de La Tranquera, la recuperación experimentada en los últimos meses de 2022 se ha ido al traste en este arranque de 2023, y tras las compuertas de Carenas se almacena ya un 0,3% menos de agua que el año pasado. En Monteagudo, la situación es todavía peor, y el nivel es más de un 4% inferior al de 2022. Con esta situación, y ante la previsión de que las lluvias no parece que vayan a llegar, comienzan a encenderse algunas alarmas de cara a la llegada del calor.