EL COLE DE ALHAMA DISFRUTA DE UNA JORNADA DE CAMPO Y NATURALEZA CON ESPÍRITU ANIMAL RURAL Y LA GANADERÍA MARCO LARA

Este pasado viernes, los alumnos y alumnas del CEIP Pablo Luna vivieron una experiencia única en el Alto Jalón. Bajo un sol radiante, se adentraron en un viaje lleno de descubrimientos, emociones y naturaleza viva, con un recorrido educativo que los llevó a conocer de cerca tanto a las aves rapaces de Espíritu Animal Rural, como a una de las profesiones más tradicionales de la zona: la ganadería ovina de extensivo 'Marco Lara'.

La jornada comenzó con una visita a Espíritu Animal Rural, donde la magia de los cielos cobró vida. Entre vuelos rasantes, miradas atentas y sonrisas nerviosas, los escolares aprendieron curiosidades fascinantes del mundo de las rapaces. ¿Sabías, por ejemplo, que los búhos ven mejor de noche que de día? O que en nuestro entorno natural es posible ver a cernícalos como Peri, una simpática embajadora alada que se posó con total confianza en los guantes —y hasta en las cabezas— de los pequeños y pequeñas asistentes.

Pero no fue la única estrella del aire. Nyx, una elegante lechuza negra, sorprendió a todos con la sutileza y silencio de su vuelo, dejando boquiabiertos a los más curiosos. Y si hubo un momento lleno de adrenalina y emoción, fue cuando Orión, el majestuoso águila de Harris, voló directamente hacia los brazos de niños y niñas que contenían la respiración con los ojos bien abiertos. El vuelo de las rapaces fue mucho más que un espectáculo: se convirtió en una clase viva de biología, empatía y respeto por los animales, gracias al trato cercano y didáctico de Paula y María, las guías de Espíritu Animal.

Tras reponer energías con el almuerzo, llegó el turno de una inmersión más detallada en la naturaleza local a través del Aula Medioambiental. Entre cráneos, huellas, plumas y nidos, el alumnado aprendió a descifrar los mensajes ocultos del campo y a entender mejor los rastros que deja la fauna que les rodea.

Pero el aprendizaje no terminó ahí. El broche final lo puso la visita a una de las últimas ganaderías extensivas de ovino del municipio, Ganadería Marco Lara, donde José Miguel Marco y Eva Lara abrieron sus puertas con orgullo. Allí, los escolares conocieron de primera mano cómo es el día a día en el campo y, sobre todo, escucharon con admiración a Ana, su hija y compañera de clase. Ganadora del premio Jalón de Plata Mujer 2024, Ana demostró con convicción que su futuro está ligado a las raíces del territorio: quiere ser veterinaria y continuar el legado ganadero de su familia. Durante la visita, ella misma se convirtió en guía improvisada, enseñando a sus compañeros el valor de un oficio que —aunque en declive— aún late con fuerza en manos jóvenes decididas como la suya.

En definitiva, fue un día de campo en el más amplio sentido de la palabra: un contacto real con la tierra, el cielo y las personas que mantienen vivos los oficios y el conocimiento del medio rural.

Una jornada para aprender, compartir y valorar lo que tenemos tan cerca y, muchas veces, tan poco visible, que la próxima semana repetirán el resto de los alumnos.