La localidad soriana de Layna cerró ayer domingo sus fiestas de verano tras una semana completa de celebraciones que han destacado por la altísima participación, el buen ambiente y el colorido que llenó sus calles desde el pasado lunes.
El programa de actividades, organizado íntegramente por la Asociación Sociocultural "Centro Social Amigos de Layna", pensado para todas las edades y gustos, ofreció propuestas deportivas, concursos, animación infantil, gastronomía y música en directo. Entre las muchas citas estuvo la excursión en bicicleta, que reunió a diferentes generaciones pedaleando juntas en una actividad que simbolizó el espíritu comunitario de las fiestas.
También resultó muy original la iniciativa del mercado Walapop vecinal, que permitió dar nueva vida a objetos en desuso gracias al intercambio entre vecinos o el freetour, que recorrió la historia y el patrimonio del municipio.
El jueves fue, como cada año, el momento más esperado. Aunque la fiesta llevaba ya varios días en marcha, el pregón oficial, en el que se acordaron de sus mayores, marcó el arranque solemne de las celebraciones.
El posterior pasacalles de disfraces con charanga fue un auténtico espectáculo de ingenio e imaginación, llenando las calles de alegría, música y colorido.
A lo largo de la semana se celebraron torneos deportivos, fiestas de la espuma, juegos infantiles e hinchables, además de una variada programación musical con grandes orquestas y grupos en directo que mantuvieron la animación hasta altas horas de la madrugada.
La gastronomía también tuvo un papel destacado, con el concurso de tapas y las comidas populares que reunieron a vecinos y visitantes en torno a la mesa.
Con este amplio programa, Layna se despide de unas fiestas de verano que han sido un rotundo éxito, confirmando una vez más el carácter acogedor y participativo de la localidad del Alto Jalón.
JALON
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