"TODAVÍA HAY GENTE QUE, TRAS EXPLORARLES, ME DICEN QUE CUÁNDO VA A VENIR EL MÉDICO"

• Con motivo de la celebración, ayer 11 de febrero, del 'Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia', en El Alto Jalón queremos destacar el papel de nuestras investigadoras y científicas, hijas, vecinas o adpoptadas de la comarca del Alto Jalón en este especial #QueremosDarteVoz de la Mujer y la Niña en la Ciencia. La segunda invitada a este #QueremosDarteVoz es Laura Tejada:

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Desde muy pequeña he pasado mis veranos en Arcos. Recuerdo los nervios por llegar cuanto antes en el camino de ida, y las lágrimas en el de vuelta tras la despedida. La casa de los abuelos, las chuches en casa de mis tíos, pasar el día entero en la calle con los que ahora siguen siendo mis amigos. A los doce años nos mudamos a vivir aquí y estudié en el instituto.

Aquí ya se despertó mi ilusión por dedicarme a la sanidad, y pronto llegó el momento de irse a estudiar fuera, en mi caso, a Zaragoza. Mi andadura empezó con un grado superior en Imagen para el Diagnóstico y mi primer trabajo fue en un servicio de radiodiagnóstico. Siempre con la mirada puesta en mi objetivo, y por fin llegó, medicina. Tras la carrera, el examen MIR y después la residencia de Medicina de Familia, en la que me formé para lo que soy ahora mismo, como profesional y también un poco como persona. Para ello me rodeé de grandes profesionales, hombres y mujeres, pero mis referentes, por acompañarme de principio a fin, mis dos tutoras, mujeres de ciencia, mujeres de corazón, mujeres de lucha. De lucha porque cada vez aparezcan más nombres femeninos como autor principal en proyectos de investigación, lucha por hacer de la ciencia algo muy humano, con cada unos de nuestros pacientes.

Por suerte creo que he llegado al mundo de la medicina en un momento en el cual la mujer tiene su camino más que reconocido. Para ello, a lo largo de la historia hemos necesitado mujeres valientes que consiguieron dar los primeros pasos por nosotras, entre otras muchas, la primera en recibir el título de medicina en 1849, Elizabeth Blackwell. Desde entonces a esta parte, los datos han cambiado mucho. En los últimos años se han registrado más mujeres colegiadas que hombres.

A lo largo de mi trayectoria, nunca he sentido que por ser mujer no pudiera llegar al mismo nivel de reconocimiento que mis compañeros, y me he sentido valorada tanto por ellas como por ellos (incluyendo aquí a mis pacientes). Como anécdota si que puedo contar que todavía hay personas que después de valorarlas, atenderlas e incluso tratarlas, preguntan cuando va a venir el doctor a verle, a lo que contesto que esta vez le ha tocado la doctora. Es tarea de todos conseguir que estas ideas preconcebidas pasen a ser parte del pasado.

En la actualidad, trabajo como médica en Urgencias del Hospital Santa Bárbara de Soria. Orgullosa de formar parte de este gran equipo, formado por personal de enfermería, de ambulancia, auxiliares, personal de administración, de limpieza, celadores, seguridad, médicos… Aquí, juntos, vivimos todo tipo de situaciones, momentos de mucha tensión con los pacientes más críticos, momentos tristes y otros alegres, a veces las cosas salen tal y como las planeas y otras no tanto... siempre afrontando cada caso con el máximo esfuerzo e ilusión, sea la hora que sea. Porque todos y cada uno de esos momentos nos hacen crecer como profesionales y como personas.

Si me preguntas si el haber pertenecido al mundo rural ha podido influir en mi carrera, diría que sí, y siempre para bien. Estoy orgullosa de mis raíces y creo que me ha ayudado a ser cercana con mis pacientes y empática, cualidades que en los tiempos tan difíciles que nos está tocando vivir en estos últimos meses, se han hecho más necesarias aún si cabe que antes.

¿Animaría a las niñas a ser nuestras futuras médicas? Por supuesto que sí, y a los niños también. Creo es una carrera apasionante que no cesa nunca, de principio a fin. Siempre formándote, siempre aprendiendo cosas nuevas (de los libros, artículos, publicaciones, y lo que es más importante, de las personas que te rodean). Una profesión que te permite entrar en el mundo de la investigación, del trabajo en equipo que para mi es imprescindible siempre y muy enriquecedor.

La ciencia nos ha llevado a ser lo que somos en la actualidad, no le pongamos límites, ni barreras, y mucho menos por motivos de género. Que todas las personas puedan luchar por esos sueños que tenemos de niños y tan felices nos hacen de adultos.