UNA LUZ AL FINAL DEL TÚNEL PARA LA REPARACIÓN DE LA IGLESIA DE SAGIDES EN EL DÍA DE SU PATRONA

Momento de la misa de ayer en Sagides en honor a la Virgen de los Desamparados. Foto: Alberto Sobrino

El pueblo de Sagides, pedanía de Arcos de Jalón, celebró ayer la festividad de su patrona. El estado del templo en honor a la Virgen de los Desamparados, acosado por las termitas y las humedades provocadas por las ruinas colindantes, invitaba a la realización de la misa en el jardín delantero de la iglesia. La borrasca Mathieu obligó ayer a celebrar el culto finalmente dentro del templo, extremando la seguridad ante posibles desprendimientos de los retablos y hundimiento del suelo.

La importancia de la celebración de la misa por la Virgen de los Desamparados gozaba este año de mayor importancia si cabe ya que es el momento en el que más donativos se recogen en la iglesia de Sagides, principal fuente de financiación para cubir los gastos que van a derivarse de los arreglos del templo. 

Una veintena de vecinos, con la representación del Ayuntamiento de Arcos de Jalón en la figura del alcalde pedáneo, acudieron a la celebración religiosa y a la posterior rifa de la tradiccional tarta, consiguiéndose recaudar 463€. "La deuda se ha saldado y se ve ilusión en la gente por ayudar", expresaba ayer José María Cordero, párroco de Medinaceli, de quien depende la iglesia de Sagides. 

Las actuaciones urgentes en la iglesia de Sagides pasan por la eliminación de la plaga de termitas que ha afectado al suelo y a los retablos laterales, y por apuntalar el retablo principal, que se encuentra descolgado y en peligro de venirse abajo si no se realizan los trabajos en un corto espacio de tiempo. El párroco José María está inmerso en la solicitud de presupuestos y la búsqueda de financiación, y ayer comunicaba que la segunda comunidad camino Neocatecumenal de la parroquia Virgen del Cortijo de Madrid ha iniciado una colecta especial para ayudar a Sagides gracias a que "desplegué la artillería pesada y mandé mensajes a todo el mundo", indica Cordero.

Tras la misa de celebración por la patrona de Sagides, los vecinos asistentes disfrutaron de la tarta, que tradicionalmente es subastada, y que "nos comimos entre todos" como apuntaba José María. En Sagides esperan repetir experiencia el próximo verano como indica el párroco afirmando que "este verano haremos otra".