En el ecuador de la legislatura, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Arcos de Jalón trabaja en la recuperación económica y social del municipio, con la incertidumbre que genera la situación de pandemia y con la mirada puesta en las posibilidades de reversión del fenómeno de despoblación. Hablamos con Jesús Ángel Peregrina, alcalde del municipio, para hacer balance de la primera mitad de su mandato.
P- Una primera mitad legislatura marcada por el coronavirus en la que todos los planes tuvieron que ser pospuestos...
R- Tuvimos que cambiar completamente el chip con la llegada del coronavirus. Hubo que pararlo todo para hacer una gestión de la crisis sanitaria y lo que considerábamos necesario antes de la pandemia, pasó a ser completamente secundario o innecesario.
P- ¿Cuál fue la principal prioridad a cubrir desde el Ayuntamiento?
R- Durante la pandemia nos preocupaba mucho la atención a las personas que estaban solas y la de los habitantes de las pedanías.
P- ¿Hubo momentos complicados?
R- Recuerdo la dificultad para conseguir mascarillas para todo el mundo en el primer momento, por ejemplo. La soledad de la gente en sus casas era lo más importante de solucionar porque por suerte, se pasó toda la primera ola bastante tranquila en cuanto a contagios. Surgió un grupo de voluntarios por Whatsapp, para atender a las personas solas durante el confinamiento domiciliario. Es de lo mejor que sacamos de la pandemia en el pueblo.
P- Y ahora que nos acercamos a la inmunidad de grupo y en plena desescalada y apertura...
R- Una vez pasado lo peor, nos preocupa mucho la supervivencia del comercio y la hostelería del pueblo, que está sufriendo mucho la crisis y la incertidumbre que todavía hoy en día hay por no saber como van a evolucionar las cosas.
P- ¿Qué puede hacerse desde el consistorio para ayudar a mejorar esta situación y reactivar la economía?
R- Desde el ayuntamiento es complicado reactivar la economía con los recursos que tenemos. En el próximo Pleno queremos sacar adelante una nueva línea de ayudas para intentar que los negocios puedan desahogar las situaciones que tienen y continuar trabajando. Con las contrataciones del Ayuntamiento hacemos también un poco de 'plan social ', pensando en que la pandemia ha destruído empleo. Hay actividades, como el área de Abades de Lodares donde trabaja mucha gente del pueblo, que no sabemos qué va a pasar con ella y esta gente tendrá que trabajar.
P- ¿Y la actividad cultural?
R- Estamos deseando que esto acabe para reiniciar toda la actividad social y cultural del pueblo. El Centro Cívico se inauguró en marzo de 2018 y se tuvo que cerrar cuando empezaba a ser ya el elemento dinamizador del ocio, la cultura y las relaciones sociales de la gente del pueblo. Este año abriremos la piscina con todas las medidas de seguridad y ya se ha presentado un hostelero que quiere gestionar la explotación del bar. Estamos ultimando los preparativos.
P- ¿Sacamos algo positivo de la pandemia?
R- Lo mejor que hemos sacado de toda la crisis es la solidaridad vecinal, que ha sido el gérmen de la agrupación de Protección Civil de Arcos, y la constatación de que el fenómeno de la despoblación se puede revertir a través del teletrabajo y de la puesta en valor de la vida en en medio rural.
P- ¿Qué acciones se pueden llevar a cabo desde un Ayuntamiento para favorecer la vuelta al mundo rural?
R- El Ayuntamiento hace todo lo que puede para proveer de conectividad a todo el municipio, que es vital para el teletrabajo. La fibra óptica se está desplegando y, dentro de nuestras capacidades, hacemos lo posible para que en todas las pedanías haya cobertura. Hemos puesto antenas de telefonía móvil en Sagides, Velilla de Medinaceli y Somaén, a pesar de que no son competencias municipales.
P- ¿Cómo puede influir la implantación de un Ciclo de Formación Profesional?
R- Desde el ayuntamiento siempre estamos mirando posibilidades de desarrollo y esta es una de las que se ha materializado. Es muy importante para el municipio que se imparta en el Instituto un módulo de Formación Profesional. Esperamos que al menos salgan 12 alumnos para que el ciclo salga adelante. Hemos contactado con institutos de Ateca, Almazán y Sigüenza para ofrecer a sus alumnos que no vayan a ir a la universidad una opción formativa con muy buenas salidas profesionales. Estamos habilitando la Escuela Hogar, que ahora va a ser Residencia de Estudiantes, con todas las necesidades para que podamos acoger ahí a estudiantes de otras zonas que vengan al ciclo formativo. Esperamos que dinamice mucho al pueblo con alumnos que vengan a la residencia y nuevos profesores.
P- ¿Hay salida en el medio rural para profesionales de este u otros ciclos?
R- Hay mucha demanda y podría generarse más. Uno de los problemas de las zonas rurales para que se implanten empresas es la falta de mano de obra cualificada. También hay demanda de profesionales como fontaneros, electricistas, informáticos...
P- Y también de empresas que oferten trabajo y quieran instalarse aquí o deslocalizar sus centros de trabajo...
R- Ya hemos tenido el interés de empresas como Híberus para deslocalizar a sus trabajadores, pero el desarrollo del municipio pasa también por la negociación con SEPES, con quien tenemos una reunión el martes para tratar el tema del polígono industrial. Estamos en desigualdad de condiciones con otros polígonos del entorno, que son municipales y pueden ofrecer a las empresas otras condiciones mucho mejores que las nuestras. La diferencia es entre 8 euros el precio cuadrado en lugares como Medinaceli y más de 40 euros aquí.
P- ¿Cuál es la petición del Ayuntamiento a SEPES?
R- El Ayuntamiento ya asume todo el mantenimiento y los cuidados del polígono pero no tenemos la capacidad de negociar con las empresas que quieren venir. Queremos que el Ayuntamiento pueda gestionar y manejar el precio del suelo industrial del municipio. Que nos lo vendan por una cantidad simbólica o asumible sería lo suyo. Si SEPES no cede, la solución será hacer una modificación presupuestaria para construir un nuevo polígono industrial y olvidarnos de La Malita.
P- ¿Por qué este movimiento ahora?
R- Llevamos mucho tiempo necesitándolo, pero además ahora la U.E. ha aprobado la fiscalidad diferenciada para Soria, Cuenca y Teruel y estamos esperando a que el Gobierno mueva ficha en este sentido. Es necesario un trato de discriminación positiva con las zonas despobladas. Con esta medida, una empresa de 15 trabajadores se estaría ahorrando más de 1.500 euros todos los meses por estar instalada aquí, lo que ayuda a ser más competitivos. Esto puede ser un revulsivo para la deslocalización de las empresas hacia las zonas rurales. Para que esto en Arcos tenga resultado, necesitamos tener un precio del suelo industrial aceptable.
P- ¿Tiene presupuesto un Ayuntamiento para todas las inversiones que son necesarias para permitir una reversión efectiva de la despoblación?
R- Tenemos unos presupuestos muy limitados, por eso es importante que participemos de la inversión de Europa. Los Ayuntamientos deberíamos poder gestionar parte de los fondos Next Generation para proporcionar a las zonas rurales lo que necesitan. Desde el grupo popular promovemos mociones para solicitar esto al Gobierno, porque lo creemos muy importante.
P- ¿Hay voluntad desde el Gobierno de España para repoblar las zonas rurales?
R- Desde los despachos de Madrid se mira a Soria capital en lugar de a las zonas rurales de Soria. Uno de los ejemplos es la colocación en la capital del Centro de Datos de la Seguridad Social, que si es por frío, se podría haber puesto mejor en Duruelo.
P- Además de la atracción de industria, ¿qué otras posiblididades de desarrollo tiene el municipio?
R- Tenemos una oportunidad con acciones como la Biblioteca para Emprender, que está despertando inquietudes emprendedoras en sectores como el turismo, la apicultura y en torno a los recursos de nuestra zona, y también con las energías renovables. Ya los parques eólicos dan trabajo en la comarca y ahora hay proyectadas dos instalaciones fotovoltáicas, en Urex y en Layna, que esperamos que generen también empleo en la zona. También están surgiendo nuevos cultivos, como la trufa, alrededor de los cuales creemos que puede generarse empleo y emprendimiento.
P- ¿Es atractiva la vida rural para los jóvenes?
R- Tenemos que cambiar las mentalidades. Mientras la población piense que para triunfar hay que vivir en la ciudad, tenemos poco que hacer. Mira lo que pasa en Alhama de Aragón, que hay trabajo de sobra con los balnearios y Zalux, pero la gente se va a vivir a Calatayud y Zaragoza.
P- ¿Y esto no tiene que ver con una oferta cultural escasa y poco enfocada a los jóvenes?
R- La oferta cultural de los pueblos está lógicamente adaptada al tipo de gente que vive en ellos. Traemos muchas cosas para la gente mayor porque es el segmento mayoritario de público. En Arcos estábamos generando una oferta cultural, completamente gratuita para el ciudadano y muy amplia, que nos paró en seco la pandemia. Es muy complicado programar cultura en los pueblos y hace falta que la gente responda más cuando se promueven actividades culturales y las llene. Tenemos muy poca población, pero se han promovido muchas cosas que hemos ofrecido gratuitas y la gente no ha respondido porque han preferido estar en la zona de bares. Ahora viene una obra de teatro contra la violencia de género, veremos cómo responde la gente joven.
P- ¿No hay implicación de los jóvenes en la vida social del pueblo?
R- En Arcos es necesaria más implicación de la población en general en las actividades municipales. Siempre son los mismos los que colaboran de forma voluntaria y con eso no se puede tirar de todo.
P- Sí que hay un grupo de voluntarios para el control de la colonia felina, pero hay una parte de la ciudadanía, no solo que no colabora con la campaña, sino que parece no entenderlo...
R- El Ayuntamiento ha buscado la forma de convivir con los gatos y controlar su población para que no afecte de forma negativa a las personas. Todo el trabajo y todo el dinero que gasta el Ayuntamiento y todo el trabajo del grupo de voluntarios, es en balde mientras haya gente que les alimente fuera de los puntos habilitados. Hay quien se dedica a entorpecer este trabajo dando de comer a los gatos desde el balcón así que, desde ya, quien alimente a los gatos en la calle será sancionado acorde a la ordenanza municipal.
P- Para terminar, la pregunta que todo arcobrigense nos está haciendo llegar. ¿Habrá fiestas en septiembre?
Fiestas como tal entiendo que no va a haber. Otra cosa es que podamos programar alguna actividad dentro de esa semana, como algún partido de pelota, algún espectáculo o una carrera de bicis que estamos pensando para el fin de semana anterior, pero verbenas y toros no va a ser posible. La recomendación de la Junta es no hacer festejos y tampoco nos van a dar las autorizaciones para realizar eventos que provoquen aglomeraciones. Somos los primeros a los que nos duele, pero no se puede hacer otra cosa.
JALON
NOTICIAS.ES
Comentarios