Nueve meses hemos tardado en dejar de lado las preocupaciones, el estrés y el agobio para dar paso a la mejor época para los estudiantes. El verano. Por fin podemos disfrutar de un buen verano como nos merecemos, levantarnos sin prisa y hacer lo que queramos sin tener obligaciones, como estudiar, aunque a mí, algún año me ha tocado compaginarme las dos cosas y también se puede. Además, con las medidas que nos han quitado refiriéndome al tema covid-19, podremos planear muchas cosas más de las que por seguridad no nos dejaban hacer. Quedarte hasta las tantas hablando con tus amigos en un banco, conocer gente nueva, salir de fiesta, vamos, lo que normalmente se suele decir, no pasar por casa. Aunque no tenemos que olvidarnos de colaborar en casa.
Comentarios