ASTÉRIX Y EL DESCARADO EXPOLIO DEL MUNDO RURAL

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Atrás quedaron los tiempos en los que los habitantes de un territorio vivían de su riqueza. O al menos esto deben pensar desde las altas esferas mientras se frotan las manos con el expolio del mundo rural. Mientras nos despoblamos, ellos ven todo lo que dejamos atrás convirtiéndose en dinero, aunque sea a pesar de destruir nuestro entorno natural, olvidar nuestro pasado y condenarnos a todos al destierro. Pero no cuentan con que estamos unos pocos que no nos vamos a marchar. Como si de Astérix y Obélix se tratase, nos vamos a parapetar en nuestros pueblos utilizando nuestro empeño por defender nuestro modo de vida como la pócima mágica que nos permitirá no doblegar frente a esta hercúlea tarea.


Hoy, miércoles 25 de enero, Felipe González y Javier Lambán abrían en Zaragoza el foro 'El desafío de los grandes incendios forestales. Impactos en el territorio' con su mesa titulada ‘Megaincendios. Entre el caos y la oportunidad. El caso de Aragón’. Entre el caos y la oportunidad... No, no es una errata, he sentido la necesidad de escribirlo dos veces porque ponerlo en negrita me parecía demasiado poco para dotarlo del énfasis necesario. Una oportunidad, entiendo, como la de reforestar "gratis" el monte gracias a que una empresa privada se encarga de hacerlo para vender después reducción de huella de carbono a otras grandes contaminantes. 


Precisamente de eso han hablado el expresidente y el presidente aragonés en su charla de hoy, de trabajar en el monte con la empresa privada para "convertir en energía renovable el excedente de combustible del monte". Esto lo ha dicho González después de hacer toda una argumentación en favor de contar con la gente del territorio para tomar decisiones, así como de mejorar los servicios de prevención y extinción, algo que venimos también pidiendo los vecinos de las zonas quemadas en el Alto Jalón el pasado verano. Sin embargo, creo que nosotros lo vemos de otra manera: ¿por qué no en lugar de meter a empresas privadas, mejoramos tanto esos servicios públicos como para que no tenga que venir una empresa privada a llevarse fuera el beneficio? Eso generaría riqueza real en el territorio, ya que tendríamos empleados públicos fijados cada pueblo desarrollando este trabajo, en lugar de contratas de subcontratas de multinacionales que vienen, ven y vencen. Pero claro, le estoy diciendo esto a un expresidente que abrió la veda de las privatizaciones y acabó de consejero de una de las empresas rentables cuyo beneficio antes era para todos (Gas Natural para quien no se acuerde).


Y esta oda de González y Lambán a la colaboración público-privada, donde lo público tiene la fama y la privada carda la lana, llega un día después de que el Congreso de los Diputados elimine la hasta ahora necesaria Declaración de Impacto Ambiental -DIA- para los proyectos de construcción de centrales eólicas y solares cuya potencia sea de 50 megavatios o más. De este modo, el Real Decreto contempla que los proyectos de energías renovables se someterán a un nuevo procedimiento denominado de ‘afección ambiental’. Esta afección ambiental se obtiene mediante documentación que elabora el mismo promotor. Además la administración deberá resolver en 10 días cada uno de los proyectos presentados y sin necesidad de exposición pública, a diferencia de la situación vigente hasta ahora, en la que la evaluación se alargaba varios meses y todos teníamos oportunidad de argumentar en contra.


Todo esto lo ordena el Real Decreto en dos artículos, el 22 y el 23, mezclados junto con otras muchas medidas bien distintas como la bajada del IVA en algunos productos básicos, bonificaciones en el transporte público o novedades en materia de desahucios, y estaba dentro de un proyecto aprobado el 27 de diciembre en Consejo de ministros junto a las medidas de respuesta a las consecuencias económicas y sociales de la Guerra de Ucrania y de apoyo a la reconstrucción de la isla de La Palma y a otras situaciones de vulnerabilidad. Las medidas en paquete se han aprobado con el voto a favor de todos los partidos (diputados de las zonas rurales incluidos), salvo de PP, Vox y Ciudadanos, que lejos de votar en contra, simplemente han abstenido, como si ni las medidas en respuesta a la crisis, ni la protección del medio, fuesen con ellos.


Para más satisfacción de los amantes de la teoría de la conspiración, este Decreto "trampa" viene en un contexto en el que el campo está cambiando de manos y está dejando de ser de sus pobladores, para formar parte de las carteras de fondos de energías renovables, forestales y con objetivos de reforestación para la captación de derechos de CO2. Un 20% del campo español ya es de estos desalmados e impersonales fondos, esos que "manejan" tanto que parece que adivinasen por dónde va a salir el gato que hay que llevarse al agua, están invirtiendo en fincas rústicas, sobre todo en Castilla y León, casualidad o no, la Comunidad Autónoma más despoblada de España - y cada día un poco más-, gobernada por un bipartito PP-VOX más preocupado por eliminar el derecho al aborto que por frenar el descenso poblacional. Esto lo digo, para que quede claro que no es Eduardo Inda el que escribe este editorial.


Y aquí, en medio de toda esta tormenta, es donde enciendo el caldero de la pócima mágica. Porque nosotros no queremos que nuestro territorio se convierta en una mina de recursos para otros a costa de que perdamos toda posibilidad de subsistir. Porque nosotros tenemos proyectos, ilusiones, deseos... y queremos llevarlos a cabo en nuestros pueblos. Porque somos tan importantes como ellos y no queremos tener que sucumbir a su forma de vivir. Porque no vamos a consentir que la avaricia de unos pocos nos obligue a todos a vivir en colmenas de pladur, entre luces de neón y carteles de "compra aquí". Porque creemos que somos la España de las Oportunidades, pero para las personas, no para las grandes fortunas de nuevo... Vamos a quedarnos y vamos a exigir. Vamos a juntarnos todos, el mundo rural entero, para cambiar voluntades en los Gobiernos. Vamos a reclamar que se cumplan los objetivos de sostenibilidad, que se apueste por una forma de vida más natural, que se proteja a la persona siempre más que a la entidad y que se apueste por la innovación en nuestros pueblos respetando y protegiendo su identidad.


Feliz semana altojaloneras y altojaloneros, todos unidos en defensa del mundo rural.

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