SAN VALENTÍN

|

El Residente


     Ayer no pensé en ti……me lo propuse firmemente, tenía que ser así.


     Me levanté firme y resuelto, debía ser fuerte y cumplir. Me dediqué a mis asuntos cotidianos, decidido, convencido, seguro de mí.


     No pensaría en esos tizones negros que algunas veces hablan cuando se fijan en mí.


      No escucharía a tus manos gesticulantes y expresivas, ni pensaría en las mías cuando bucean en ti.


      No te oiría reír.


      No sentiría la tristeza que me embarga cuando veo tu figura alejarse, ni la alegría que me inunda cuando vienes hacia mí.


       Sería como ese cazador que suelta a su reclamo, y este, una vez libre, vuela lejos sin saber dónde ir.


       Bebí vino y brindé como hago contigo.


       Te vi nacer entre las volutas de humo de mis cigarros y sentí la humedad de tu boca en mi vaso vacío.


        Comí sin hambre, como hago cuando estoy junto a ti y recordé cómo el deseo me nubla la razón cuando te siento cerca de mí.


         Fue un día largo, pero lo conseguí.


         Por la noche, ebrio de nostalgia, soñé que no te soñaría….y pensé con un nudo en la garganta, que si esto había sido un día ….¿Cómo sería una vida sin ti?

Comentarios