"RECUERDO AL ABUELO ESTIRANDO EL HOJALDRE Y RELLENANDO LAS COSTRADAS CON CREMA Y MANTEQUILLA SORIANA"

La Costrada de Soria es un dulce tradicional elaborado superponiendo capas de hojaldre con un relleno, generalmente de nata y crema, y cubierta de azúcar glas con un pequeño toque de canela que también sirve para decorar. Es un manjar ligero, elegante y delicado y es costumbre de todo soriano agasajar a sus visitas con esta tarta elaborada por su pastelería favorita.

En Arcos de Jalón la tradición de la costrada viene de lejos. –“Recuerdo al abuelo, en mi infancia, haciendo costradas, estirando el hojaldre y usando mantequilla soriana para el relleno. Después se empezaron a hacer de nata, que es un poco menos dulce y la gente ya empezó a pedirla así por ser más fina y menos empalagosa”-, explica Enrique López, hijo de ‘El Abuelo José Luis’ y bisnieto del precursor de la saga pastelera arcobrigense. Desde 1845 trabaja esta familia en Arcos de Jalón endulzando cada celebración con sus productos artesanos desde el sur de la provincia de Soria.

Ya son cinco las generaciones que han pasado por este negocio. Paula López toma ahora el testigo de este obrador pastelero en el que –“siempre hemos querido mantener el carácter artesanal y el producto natural y de proximidad. Por eso postres como la Costrada se hacen por encargo y en el momento. La mejor manera de degustarla es recién hecha”-, nos dice Paula. Su tatarabuelo comenzó esta dulce historia y ella ahora asume el reto de mantener la tradición confitera, adaptando la producción a los nuevos gustos de la zona. –“Igual que en su momento se cambió la mantequilla por la nata, podemos rellenar la Costrada con cualquier relleno, como chocolate, por ejemplo, para la gente a la que no le guste la crema. La más consumida es la de nata y crema, pero la podemos hacer con cualquier relleno”-, nos comenta Paula López desde su obrador de Arcos de Jalón.

Desde el próximo 25 de febrero y hasta el día 28, se celebran los días de la Costrada de Soria. -“El año pasado ya participamos del día de la Costrada, pero se olvidaron un poco de los pueblos y se centraron demasiado en la capital”-, nos comenta Enrique, que trabaja con su hija transmitiendo la tradición en la elaboración artesanal de los dulces típicos del pueblo. Como nos comenta, -“la Costrada no tiene un día concreto en el que se consuma, para cualquier momento es un dulce perfecto. Siempre quedas bien si invitas a alguien que viene de fuera con este producto típico de nuestra tierra, aunque se hace también en otras partes de España”-. La diferencia en la producción de la Costrada la marcan la calidad de los ingredientes y el toque artesanal y casero. Según nos dice Paula, -“sobre gustos y paladares no se puede hablar, pero a nosotros nos gusta elaborar el hojaldre de forma artesanal en lugar de comprarlo hecho, así le damos nuestro toque personal y mantenemos el compromiso de hacer pastelería de forma artesanal”-.

En Arcos de Jalón, más de 150 años de historia contemplan a la quinta generación de la familia López recibiendo el testigo de la tradición artesanal pastelera. La apuesta por mantener los procesos productivos artesanales y su minuciosa selección de la materia prima, que han hecho que tanto FOES como la Cámara de Comercio de Soria reconozcan su trayectoria, son la seña de identidad de esta familia. Desde el Alto Jalón, padre e hija, Enrique y Paula, apuestan por el comercio de proximidad y por la producción artesanal, endulzando a toda la comarca y a la provincia de Soria.