LAS ALTERACIONES DE ARIZA DEL S.XVI EN UNA CANCIÓN DE LA RONDA DE BOLTAÑA

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“En enero de 1992 un grupo de amigos que nos habíamos reunido alrededor del grupo del Palotiau de Boltaña*, con el que llevábamos tocando ya desde algunos años atrás, pensamos en la posibilidad de recuperar la ronda, un acto que había sido importante de nuestras fiestas, pero se había perdido. Aquel día de San Pablo, fiesta menor de Boltaña, las viejas piedras del casco antiguo volvieron a vibras con los familiares pero casi perdidos sones de la gaita que, desde que en los años sesenta muriera Chuan de Cazcarra, el último de los gaiteros de Sobrarbe, no había rondado por las calles de nuestro lugar. Y con ella sonaron la trompa (un oboe popular), los acordeones, guitarras, guitarricos, laúdes y bandurrias, los instrumentos de la rondalla. Y hubo jotas, -cómo no-, pero también, como las ha habido siempre en las rondas de la montaña, mazurkas, polcas y pasodobles, músicas de Sobrarbe, del Pirineo entero y de todo Aragón; porrones y pastas, canciones y baile… Hubo de nuevo ronda.”

Así lo cuentan los de La Ronda de Boltaña en su página web. Ese año de 1992 en las fiestas mayores de agosto iniciaron una ronda que todavía rueda por los pueblos de Aragón y otros lugares y se han convertido en un grupo musical querido y reconocido popular e institucionalmente. En 1998 su canción El país perdido fue nombrada himno oficial de Sobrarbe y en 2017 recibieron la medalla de Las Cortes de Aragón.

Sus letras inicialmente se referían a Boltaña, Sobrarbe, pueblos abandonados, pantanos que inundaron territorios, fiestas y costumbres del entorno pirenaico pero, poco a poco, se han ido abriendo a nuevas temáticas relacionadas con la actualidad y la historia de todo Aragón. En su último disco Bailando entre las ruinas, se incluye la canción Cierzo y mal señor, en la que se hace referencia a la sublevación de los campesinos del Alto Jalón en el s.XVI conocidas como Las Alteraciones de Ariza. En la Gran Enciclopedia Aragonesa encontramos la narración de los hechos:

 “El inicio de la revuelta antiseñorial de Ariza data de finales del siglo XV. Hacia 1490 los vasallos entablaron pleito contra su señor, don Guillén de Palafox, pretendiendo liberarse de su condición por la vía legal. Previendo que, a pesar de las razones esgrimidas, la sentencia les iba a ser desfavorable, optaron por apoyar sus pretensiones con las armas, llegando a sitiar a su señor, el cual, una vez levantado el cerco, ordenó en represalia la ejecución de los cabecillas de la revuelta.

Esta acción, en lugar de conseguir el escarmiento de los súbditos, provocó la generalización de la revuelta, que no iba a poder ser sofocada ni con la llamada sentencia de Celada, dada por Fernando II (el Católico) a comienzos del siglo XVI: en esta sentencia no quedaba recogida ninguna de las reivindicaciones de los vasallos, por lo que, tras unos años de calma tensa, los vecinos de Ariza volvieron a pleitear contra don Rodrigo de Palafox, nieto de don Guillén, negando al señor la potestad absoluta.

La nueva sentencia, dictada por Carlos I y los cuatro brazos del reino, tampoco recogía las aspiraciones de los vasallos y presentaba, además, el agravante de que las sentencias de esta especie de tribunal eran inapelables, con lo que se vedaba a los vasallos la posibilidad de alcanzar la libertad por vía legal. Los únicos medios eran las armas o un acuerdo particular entre las partes; pero ambos sistemas contaban con unas probabilidades de éxito prácticamente nulas, pues el interés del señor coincidía con el del estamento nobiliario, que no podía ver con buenos ojos cualquier movimiento tendente a alterar el orden social establecido.

A pesar de las escasas esperanzas de éxito, los vasallos volvieron a tomar las armas a la muerte de don Rodrigo. La sangrienta rebelión, que no pudo ser abortada ni siquiera con la intervención del gobernador de Aragón, don Juan de Gurrea, tendría su momento culminante en marzo del año 1561, fecha en que los vecinos de Monreal de Ariza mataron de un disparo de arcabuz a su señor, don Juan de Palafox.

La represión subsiguiente fue muy dura. El lugar fue quemado, la mayoría de las casas destruidas y muchos de los vecinos que habían logrado huir a las Indias o a Italia, eran castigados allí donde se les encontraba. Los que permanecieron en el señorío pronto volvieron a reiniciar los pleitos con renovados bríos y la inseguridad nuevamente se adueñó del señorío.

Durante las cortes del año 1585 se produjo un cambio de orientación en la política del monarca, hasta entonces incierta: Felipe II decidió apoyar abiertamente la causa de los Palafox, que habían presentado un extenso «greuge» en las Cortes. Ordenó el rey que se diera posesión del feudo al heredero, don Francisco de Palafox; que se castigara a los vasallos, haciéndoles pagar grandes sumas de dinero por los daños causados, y que se les desarmara, para evitar nuevas rebeliones. En el señorío se instauró una paz tensa, dominada por un sentido de desconfianza patente todavía en 1588, cuando, decididos los vasallos a colaborar en la pacificación del reino, fueron rechazados por temor a que, viéndose de nuevo armados, otra vez se rebelasen contra su señor.

Como decíamos, la canción Cierzo y mal señor, con letra de Manuel Domínguez y música de Martín Domínguez, relata estos lamentables sucesos y La Ronda nos explica cómo se gestó:

“Aunque ahora retocada, la letra de esta canción sobre las revueltas campesinas del siglo XVI, fue escrita en 1981. Caso único entre nuestras canciones, hasta ahora siempre habíamos hecho al revés: ponerle letra a una música. Y en los intermedios instrumentales se han utilizado dos piezas de la época (que bien pudieron sonar en la corte del señor): una es “Con qué las lavaré”, una canción de desamor anónima que conoció un enorme éxito a lo largo del s.XVI y aparece en el cancionero de Upsala, publicado en 1556 en Veneciai; y la otra, algo anterior, “Danza Alta”, de Francisco de la Torre está incluida en el cancionero de Palacio (1474-1516), que recoge música de las capillas de los RRCC”


CIERZO Y MAL SEÑOR

¡Sosegad!, sentaos aquí cerca un rato,
que, si así os parece, vamos a contar
una vieja historia de esta tierra nuestra
que el cierzo y los amos prefieren callar.

Cerca era del año de mil y quinientos.
cuando el campo entero fue a la rebelión.
Más que los trigales que sacude el cierzo
se agitan los pueblos bajo un mal señor.
Los amos tenían sobre sus vasallos,
su vida y su muerte, absoluto poder;
la tierra era suya, y para el campesino
sumisión y hambre, o morir de pie.

Por eso en Ariza se alzaron los siervos
y al rey acudieron como mediador.
¡Qué maldita hora la que tal hicieron!;
el rey dio sentencia en favor del señor.

A la primavera la sigue el verano,
y en las otoñadas, una y otra vez,
las cosechas se iban en pagarle al amo;
las manos seguían vacías después.

Hasta que un buen día, Monreal de Ariza
arregló sus cuentas con un Palafox:
de un arcabuzazo le abrieron el pecho,
y estalló de nuevo la sublevación.

Los campos tuvieron de sobras abono
porque a sangre y fuego se les sometió.
Al año siguiente, con muy pocos brazos,
cogió gran cosecha otro Palafox.

EN LA CORTE

Las casas quemadas se fueron cayendo;
a las tumbas viejas la hierba cubrió,
y cuando la rabia pudo más que el miedo,
bajo techos nuevos la revuelta ardió.

Y aunque el rey Felipe sentenció en su contra,
al señor echaron muy lejos de allí,
y como hombres libres nombraron justicias
y se organizaron para resistir.

Se cumplía el año del ochenta y cinco,
casi todo el siglo se pasó en luchar,
y contra las tropas que les mandó el amo
se alzaron en armas para terminar.

BATALLA FINAL

¿Quién recuerda el nombre de los campesinos?...
porque el del señor, en mil libros está.
Piensa que la historia el vencedor la ha escrito.
Héroes del pueblo, ¿quién os cantará?

Letra: Manuel Domínguez
Música: Martín Domínguez






Pilar Ciutad Lacambra, desde Troncedo. La Fueva. Sobrarbe


Transcripción de un poema dedicado a José Antonio Labordeta, en el que haciendo referencia a los límites de Aragón se menciona a Bordalba como uno de los extremos de la comunidad aragonesa. http://nosvemosentroncedo.blogspot.com/2010/09/orfandad.html



*Pincha en Boltaña si quieres saber más de esta hermosa localidad pirenaica. 

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