"CADA UNO EN NUESTRA PARCELA TENEMOS QUE DAR UN VALOR AÑADIDO PARA GENERAR NEGOCIO"

-"Perdona, que vengo de cambiarle de habitación a una mujer un armario que le vendí hace unos años"-. Así me recibe José Luis Renieblas en su tienda de muebles de Ariza, donde le estoy esperando. No llega tarde, solo que por una vez he llegado yo temprano. Aún así se disculpa: -"no me gusta que me esperen, es una máxima que tengo y más en el trabajo. Dar un servicio lo más inmediato posible es algo que nos caracteriza"-. Intentamos rebajarle el 'apuro' con un chascarrillo gracioso, aludiendo a que no estaba en el bar, sino trabajando. -"Aquí en el ámbito rural, si tienes un negocio, aunque estés en el bar, estás trabajando"-, nos responde ya esbozando un gesto más relajado.

Entramos a su tienda y nos enseña la exposición de muebles de salón y dormitorio, la sección de colchones, la de armarios, el almacén de pedidos donde hay siete u ocho preparados... Es grato ver como una tienda con exposicón de muebles del hogar y decoración, de las que encuentras en un polígono industrial de una gran ciudad, funciona en esta comarca. -"Cada uno en su parcela tenemos que dar un valor añadido para generar negocio"-, nos dice al preguntarle por qué tiene una exposición tan grande. -"La gente quiere ver los muebles. En nuestra web, www.amueblar-t.com, entran desde su casa y descargan el catálogo, miran lo que les gusta y vienen aquí a tocar los materiales y verlos. No es lo mismo si no los ves"-, nos explica Renieblas.

-"Hay gente que piensa que va a encontrar las cosas más baratas fuera"-, nos explica mientras hablamos sobre el comercio local, y añade: -"Nosotros vamos a todas las ferias, desde la de Milán, que es de las más grandes, hasta las más pequeñas y así estamos a la útlima tendencia. Incluso a varios clientes que hemos amueblado su segunda residencia nos han dicho que hay cosas que en Madrid no las han visto"-.

Aportar valor diferencial es algo que José Luis lleva a raja tabla. Antes de tomar las riendas del negocio familiar, realizó un Master en Diseño de Interiores. Ahora, gracias a eso -"hacemos estudios en tres dimensiones de proyectos integrales de casas enteras para amueblar y decorar. Los hacemos gratuitos, sin compromiso, como el presupuesto. Incluso no tienen ni que venir a la tienda, nos llaman y se lo hacemos y enviamos para que visualicen cómo quedaría su casa. Tenemos un porcentaje muy alto de éxito porque tenemos precios muy competitivos y normalmente a quien se lo hacemos nos lo compra. "-, nos cuenta antes de que nos interrumpa el teléfono. Al otro lado de la línea se oye un murmullo de voz y, tras medio segundo de silencio, José Luis comenta a su interlocutor: -"claro que sí, creo que tengo, te la llevo en un rato, hasta luego"-. Al colgar, me comenta -"un cliente, que se le ha roto una bisagra y voy a darle una nueva"-, a lo que yo le contesto preguntando cuánto le va a cobrar. José Luis Renieblas levanta las cejas y dice sonriendo -"compró el mueble hace casi treinta años, qué le voy a cobrar al hombre!"-

Me monto en el coche y salgo del parking de la tienda, mirando a ambos lados de la antígua Nacional-II, en la Calle Carretera de Madrid nº 90 de Ariza, por si lo pones en Google Maps como he hecho para venir yo. Por el camino de vuelta a Arcos de Jalón, voy pensando en encontrar valores diferenciales de los negocios de nuestros pueblos. Personalización del servicio, trato familiar, confianza y proximidad, atención gratuita de incidencias... El Corte Inglés cogió todo lo bueno que tenemos en el comercio local, le dio publicidad para que nos creyéramos que lo hacía, y a venderlo en la gran ciudad. Ahora ya ni eso, El Corte Inglés moderno, que es Amazon, sólo nos pone el precio y nos pide la tarjeta de crédito. Búscale para una bisagra diez días después y que te la lleve a tu casa Jeff Bezos. Busque, compare, y si se le rompe una pieza, compre el producto entero de nuevo.