ASUAR Y ESCUDERO REBAJAN EL DISCURSO Y PIDEN DOS ASAMBLEAS PARA DEVOLVER LA "PAZ Y ARMONÍA" A MONTEAGUDO

La polémica sobre la situación de la ganadería porcina en Monteagudo de las Vicarías y la denuncia de Margarita Asuar sobre la incompatibilidad del desarrollo de la industria porcina rayana y su actividad como directora del Castillo Museo municipal vive un nuevo capítulo. Después de enviar varios comunicados a la prensa soriana denunciando una situación "incompatible con los reconocimientos turísticos que Monteagudo está consiguiendo" y con acusaciones de prevaricación al alcalde de Monteagudo de las Vicarías, Carlos González, Margarita Asuar y Manuel Escurdero han enviado una carta a varios vecinos y vecinas de Monteagudo de las Vicarías rebajando su discurso y retrocediendo en sus peticiones al Ayuntamiento de la localidad para, según expresan, poder "seguir trabajando todos en paz y armonía".

Margarita Asuar y Manuel Escudero se dirigen ahora a los habitantes de la localidad con una misiva que comienza diciendo que "se está intentando crear una dinámica de amigos y enemigos del pueblo". En su carta, enviada vía Whats App a todos los vecinos salvo los cercanos a la corporación municipal, Asuar y Escudero denuncian que "se está intentando presentarnos como gente con intereses políticos" y aseguran que "estamos trabajando todo lo que podemos por Monteagudo". Después de llenar las redes sociales con denuncias sobre una situación de macrogranjas en las que aseguraban que "se ceban y sacrifican 50.000 cerdos al año en Monteagudo", ahora reconocen en su carta a los vecinos que "la granja que lleva funcionando desde 2019 no tiene problemas porque está alejada y al sur del pueblo" y sitúan el blanco sobre la que "está situada a 900 metros de Monteagudo y 500 metros de Pozuel de Ariza", solicitando "subvenciones al dueño de esa granja para reubicarla".

Reclamando ahora que "otras actividades como el arte y el turismo puedan ser compatibles con las macrogranjas" y muy lejos de la afirmación en su primer manifiesto de que "este plan intensivo de implantación de macrogranjas en Monteagudo es incompatible y contradictorio con el proyecto que con tanta ilusión pusimos en marcha", Asuar y Escudero parecen ahora contentarse en la reunión que mantendrán el próximo 3 de marzo, si el Ayuntamiento hace "un par de asambleas" en las que el pueblo, reunido, pueda decidir sobre la idoneidad de instalar la nueva granja que está ya autorizada por medioambiente de la Junta de Castilla y León, así como otra que está pendiente de valoración ambiental. Según su carta, piden que se informe sobre la futura localización de "las dos nuevas granjas" y en dicha asamblea "se compruebe si el sitio es el más adecuado".