LA PROCESIONARIA DEL PINO

|

Procesionaria


Las larvas de la oruga procesionaria se apiñan durante el invierno a los bolsones que penden de los pinos y , según se acerca el mes de febrero, llega la época en la que no es raro levantar la mirada hacia las copas de los grandes pinares buscando los característicos nidos blancos de la oruga procesionaria del pino, sobre todo entre aquellas personas que pasean.


Algo que normalmente ocurría sobre los meses de abril y mayo, la bajada de la oruga procesionaria de las copas de los pinos, se está adelantando debido a las suaves temperaturas de los últimos inviernos por el cambio climático. Es ya algo característico de estos meses ver largas hileras de estas llamativas orugas, en su marcha anual para buscar un lugar donde enterrarse y empezar su metamorfosis.


El ciclo de la procesionaria comienza con la eclosión de las crisálidas en junio, le sigue el apareamiento de las mariposas a final de junio, el tercer paso la puesta de huevos en las acículas de los pinos a final de julio, el cuarto ciclo la eclosión de los huevos al final de agosto, el quinto paso el desarrollo larvario para últimos de septiembre, el sexto paso la construcción de los nidos en noviembre, el séptimo paso el enterramiento entre febrero y marzo, y el octavo y último la fase crisálida en abril.


Los pelos de la oruga son urticantes y peligrosos en especial para perros, gatos y otros animales así como para niños, pueden ir de leves a muy graves requiriendo urgencia médica.

Comentarios