El problema de la contaminación del agua por nitratos en el medio rural del Alto Jalón sigue siendo motivo de preocupación, afectando a numerosas zonas agrícolas del territorio. Cada año, las incidencias relacionadas con esta problemática se hacen más evidentes, algo que se agrava durante los meses de verano debido a la escasez de agua y al incremento poblacional del medio rural, lo que eleva la concentración de contaminantes.
En toda España el valor de nitratos por encima del tope de 50 mg/l permitidos por la normativa se detectó en 171 municipios en 2022, la mayoría pertenecientes a la llamada España vaciada. Localidades del Alto Jalón como Monreal de Ariza ya han anunciado este año restricciones en el uso del agua potable para sus habitantes, declarando el agua de boca como "no apta para el consumo" al superar este umbral, y otras como Abanto, Bordalba o Torrehermosa, en la vertiente zaragozana, o Alcubilla de las Peñas, en la soriana, lidian con estos problemas.
Así lo refleja el informe ‘La contaminación por nitratos y su impacto en el medio ambiente y el agua de consumo humano’ elaborado por Ecologistas en Acción a partir de los datos publicados por el Ministerio de Sanidad en 2022, y en el que no aparece otra localidad soriana del Alto Jalón, como Utrilla -pedanía de Arcos de Jalón- que lleva años lidiando con estos problemas.
Los nitratos son compuestos químicos inorgánicos que en principio están presentes en el medio de forma natural en pequeñas concentraciones. Sin embargo, las filtraciones en el subsuelo procedentes del uso de abonos nitrogenados o de la práctica de la ganadería intensiva pueden causar este excesivo incremento.
Ante esta situación, las administraciones intentan buscar soluciones a un problema cada vez más acuciante en nuestros pueblos. La Diputación Provincial de Soria parece que ha encontrado una solución novedosa y con una inversión "relativamente pequeña", especialmente pensada para poblaciones menores a 1.000 habitantes. El presidente de la institución, Benito Serrano, ha anunciado este lunes que la Diputación de Soria ha iniciado contactos con varias empresas para intervenir en los pozos afectados por la contaminación con potabilizadoras portátiles.
Estas potabilizadoras móviles tienen un coste aproximado de 40.000 euros y una vida útil superior a los 10 años. Con su implementación, que vendría subvencionada por la Diputación de Soria, se busca paliar los problemas de los pueblos que atraviesan situaciones de urgencia cada verano debido a la contaminación del agua. De hecho, la institución provincial está dispuesta a cofinanciar la adquisición de estas potabilizadoras junto a las localidades que necesiten este servicio.
Por un importe similar al de estas potabilizadoras "portátiles", otra administración supra municipal, la Diputación Provincial de Zaragoza, solucionó en 2016 un histórico problema similar al de Monreal de Ariza, en la localidad vecina de Pozuel de Ariza. Allí, tras más de dos décadas sin poder consumir el agua del suministro municipal debido a vertidos procedentes de la ganadería, la DPZ sufragó la construcción de una potabilizadora, que costó unos 50.000 euros, de los que el Ayuntamiento de Pozuel de Ariza solo tuvo que asumir aproximadamente el 20%.
En otros casos, son Fondos Europeos los que se buscan para solucionar este problema de contaminación del agua. La Junta de Castilla y León ha anunciado esta mañana la licitación de una planta de eliminación de nitratos en la localidad de Nolay, que beneficiará a unas 150 personas de la zona. Esta actuación, financiada mayormente por la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, y en parte por el Ayuntamiento de Nolay, forma parte del ‘Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de los Fondos Europeos NextGeneration-EU’. El presupuesto en este caso es sustancialmente mayor, un total de 238.223,25 euros.
Con este escenario, el Ayuntamiento y los vecinos y vecinas de Monreal de Ariza, así como los del resto de municipios del Alto Jalón afectados por este problema, afrontan ahora un reto para solucionar de forma eficaz una situación que viene a incidir sobre el problema más acuciante, la despoblación. Para ello, una vez más se hace patente la necesidad de que las administraciones supra municipales, regionales, estatales y europeas hagan una apuesta firme por el Reto Demográfico y la Agenda 2030, proporicionando a los habitantes del medio rural un suministro tan importante y fundamental como el del agua corriente potable.
JALON
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